Rompo mi silencio de estos meses, para una entrada navideña, a modo de despedida de este año lleno de vivencias, ocurrencias y alguna que otra inyección y bienvenida al siguiente en sus dos versiones: la original y la tuneada.
Porque hay tantas realidades como días tiene el año y yo quiero conocerlas todas; transitar entre los dos mundos que presento: el real y el onírico. Y en las cosas más pequeñas (por ejemplo una guirnalda casera para un árbol de navidad diy) descubrirles la magia y el potencial que llevan.
¡Que los sueños conquisten mi 2014!